Un estúpido descuido [Celeste]

Como ya era de costumbre en mi, el equipo de quidditch ya me conocía y saben que entre Pans y yo ¿cual de las dos es mas impuntual? la verdad es que no lo sabia porque siempre llegamos casi juntas a los entrenamientos y hoy como siempre ya llevaba quince minutos de retraso para el entrenamiento.

Me encontraba en la Sala Común casi recién había llegado y me pare a hablar con uno de los chicos que estaba allí, ya que necesitaba de mi ayuda, bueno uno siempre debe ayudar a los suyos ¿no? por lo menos eso era lo que yo creía realmente siempre estaba ayudando a los míos, aunque claro siempre con un costo aparte después de la ayuda como bien dice el dicho una mano lava la otra.

Subí a mi habitación casi volando, entre sin aviso alguno, después de todo tenia mas que claro que Evan estaba con sus amigotes o por lo menos eso me había dicho el, busque por todos lados mi ropa de entrenamientos y luego mi cole para hacerme un moño, para evitar que el cabello se me fuera a la cara, pero fue así cuando recordé que la vez anterior se lo había pasado a Pans, toque pero nadie me contesto así que pase sin previo aviso, me importaba demonios si estaba ella y Blaise haciendo de las suyas, pero al contrario Allí la encontré tirada en el piso, con el cajón del velador a medio abrir -¿pero que rayos paso aquí?- de inmediato me puse en cuclillas para ayudar a mi amiga, mire el frasco que tenia entre los dedos y le mire con la ceja alzada, este no era el remedio que toma para el corazón, no señor, no lo era, luego de un rato tome mi varita y a ella, cargándola como pude a una de las chimeneas, nos puse a ambas bajo la chimenea y luego dije -Hospital San Mungo- tire los polvos y aparecimos antes de haber cerrado los ojos, allí apenas llegamos un par de médicos me preguntaron que se le había pasado yo respondí - La encontré tirada en el piso con un pequeño frasco en las manos- le pase el frasco para que supiera que era, entonces me la quitaron y le llevaron a algún lugar.

Estaba algo mas asustada de lo usual, Pans, cuando bebía Ron o Whisky no le pasaba nada de eso a lo mas se sentía mareada pero nunca al extremo de casi morir en el piso y la verdad es que no sabia que se había tomado pero ya pronto lo sabría, espere pacientemente en la sala de espera como el doctor me lo indico, estaba desesperada, no entendía que era lo que le pasaba a ella, aun tenia el frasco entre mis manos, pero ¿porque?, mire el frasco y observe cuidadosamente la tapa, esa no eran sus medicamentos para el corazón - pero... ¿que... que es esto?-

Mientras miraba el frasco, sentada, con los cabellos tapando mi rostro el doctor me invito a pasar, tire mis cabellos hacia atrás, poniéndome de pie para comenzar a caminar en dirección a la sala que estaba Pans, allí estaba ella, enchufada a mil cables, cosa que me daba algo de escalofríos, la mire y me acerque a ella diciéndole - ¿te sientes bien?- moje mis labios y arregle mi cabello - explícame, ¿que te paso?- le pregunte esperando sus respuestas.

La mire algo compacidad en la posición en la que estaba ella, si bien era mi mejor amiga, no la podía regañar como lo hacia Blaise o su madre, pero la verdad es que mi lengua la estaba atando para no hacerlo - Pans, no quiero sonar ni muy Zabini ni muy tu madre pero ¿en que demonios estabas pensando en el momento de dejar tus remedios del corazón junto a los de muertos en vida? - trague saliva y comente nuevamente ¿quieres explicármelo? le pregunte con voz muy autoritaria, ella era mi amiga y la quería tal cual como era, pero habían cosas que ella de mi no sabia, la amaba y todo aquello entre amigas, se sabe todo, pero la verdad es que a la misma vez la odia, muchas veces pensaba que Pans era una niña tonta pero realmente no lo era, era muy inteligente pero en realidad, muchas veces daba a pensar lo contrario.

Hermosa, somos mejores amigas desde el primer grado y aun no termino de conocerte ¡eres una caja de Sorpresa!, ¿lo sabias? le dije sonriendo de medio lado, para luego mover la silla con un hechizo mental, para luego tomar asiento a su lado quedando casi a la altura de ella, para que esta no se moviera a mirar hacia abajo, realmente no terminaba de conocerla todavía pero algún día terminaría de hacerlo, muchas veces me olvidaba del rol que cumplía como amiga, ya que a Evan o a cualquier persona le decía Hermosa y con Pans sabia que no le gustaba y eso muchas veces le descolocaba - Hermosa, preciosa, Pans, Amiga debo...- Calle cuando el doctor entro a la habitación y pregunto ¿como Esta la Señorita Parkinson? el doctor nos miro a ambas pero mas a mi para luego dirigir la palabra informándonos el resultado del examen Señorita, usted deberá pasar una noche aquí en el hospital debido a su mal estar, ya que en cualquier momento puede desmayar por la sobre dosis de la posición de muertos en vida. dada la información el doctor se fue dejándonos solas nuevamente, un gran silencio nos cubrió a ambas, sin dirigir ninguna palabra, agachando la cabeza.