Ayuda [Hollow]

Akasha entró al invernadero temprano, los rayos del sol aún no clareaban el día - Lumos Solem! - pronunció con autoridad, la luz iluminó la estancia y las plantas comenzaron a retroceder al instante. Esa pequeña acción era la que daba inicio a una rutina que la bruja tenía que cumplir cada día. Estaba controlando las plantas cuando notó algo, se acercó, una mueca de furia se dibujó en su rostro, babosas carnívoras!

Se dirigió apresuradamente al cuarto de trastos que estaba al fondo, buscaba el repelente pero lo único que encontró fueron envases vacíos - Dioses! Solo a mi me pasa esto - volvió al invernadero y le dijo a uno de los elfos domésticos que la ayudaban, que siguiera buscando repelente. Se preguntaba donde encontraría al guardián de llaves y terrenos, recorrió la mitad de los terrenos del colegio, "Que manera de ser escurridizo" pensó respecto al guardián, ni siquiera sabía su nombre, rondaba el límite del bosque prohibido cuando vio una silueta, pensó que se trataba de un alumno.

A medida que se acercaba notaba que era un adulto, tal vez había tenido suerte y era el guardián, al único adulto aparte del director al que conocía en Hogwarts era a su hermano, como no vivía en el castillo y el tiempo que pasaba en él lo pasaba en los invernaderos prácticamente no conocía a nadie. Se acercó al hombre y decidió tantear el terreno - Disculpe! Soy Akasha Lionheart - sonrió levemente, no daba para más, estaba angustiada necesitaba ese repelente - por las dudas es usted el guardián de llaves? - preguntó, mirando al hombre.

Se había levantado temprano,no tenia que dar clase ese día pero nada como madrugar para dar una caminata o eso siempre pensó el jefe de Ravenclaw mas esta vez era diferente debía sacar a una de sus "mascotas" para que estirara las alas así que consigo llevaba una jaula un poco grande; salio a los terrenos del colegio hasta llegar a los limites del bosque prohibido abrió la jaula para que la arpía saliera a cazar un rato observo como la criatura salio de la jaula y se poso en una de las ramas.

Vincent la vea con detenimiento le parecía un animal sumamente hermoso pese a ser bastante repulsivo físicamente hablando a la vista de otros; ocasional mente le lanzaba ratones que tenia guardados en un saquillo se terciopelo que tenia atado al cinto estaba tan entretenido alimentando a su "mascota", que poseía un cuerpo de ave de rapiña con grandes y hermosas plumas de color negro y la cabeza era de una anciana decrépita,por lo que ni se percato de la presencia de otro ser humano hasta que escucho la voz de de alguien que se presentaba antes de que se acercara mas Vincent se voltea de forma rápida-shhh no hable muy alto ni se acerque mucho-señala a la arpía que esta en la rama mientras sigue susurrando-no le gustan los extrañosse acerca a la mujer y le sonríe de manera afable-temo decirle madame que no soy el guardián ,profesor Vincent Hollow a sus servicios en que puedo ayudarla?-su sonrisa aun era amable pero le preocupaba que la arpía decidiera atacar uno nunca sabia cuando una criatura de una naturaleza tan siniestra como lo era aquella atacaría.

Siguió el brazo del hombre con la vista y la vio encaramada en el árbol, era grotesca pero a la vez hermosa, no se sorprendió como esperaba, tal vez las palabras del hombre ayudaron tal vez no era eso, no podía saberlo, pues su atención estaba enfocada en la criatura - Ah! gracias por avisar - le sonrió al hombre, comprendiendo que se había equivocado no era el guardián, lo había visto en la mesa de profesores, pero no recordaba sus datos, una vez más resaltaba lo distraída que era.

Sonrió, le encantó la caballerosidad del hombre, Hollow! claro, recordó que ese era el apellido del profesor de cuidados de criaturas mágicas, la sonrisa se hizo más evidente, todo marchaba mejor al final su caminata serviría de algo, notó la preocupación en el rostro del maestro pero igualmente sonrió - Un placer Vincent, puedo tutearte no? ya que seremos colegas y eso? - dijo en voz baja para tratar de no llamar la atención de la arpía mientras la vigilaba con la vista - Este, por las dudas usted tendría repelente para las babosas carnívoras? - preguntó recordando las plantas del invernadero - es que acabo de encontrarlas entre mis plantas y se me acabo el que tenía en el cuarto de trastos, para eso era que buscaba al guardían - dijo tratando de aclarar la situación.