Relaciones de Ella Noregue

Ella es una mujer hecha y derecha, bien educada y con gustos refinados propios de una familia de nivel. Desde pequeña sintió atracción por el arte. Toca el violín y compone sus propias melodías siempre que quiere pasar el rato. También le apasiona la lectura y el dibujo y es muy normal verla haciendo bocetos cuando no tiene nada que hacer y ha ido perfeccionando su técnica con el paso del tiempo.

Es perspicaz, muy detallista y observadora. Piensa en todo mil veces y no le gusta que sus planes sufran cambios, tengan que cancelarse o no salgan tan bien como había pensado a no ser de que haya sido para mejor. Le gusta la perfección, desea conseguirla y hara casi cualquier cosa por ella. Tiene un encanto natural que le ha ayudado a salir de más de un lio en su época de estudiante. Es orgullosa y muy astuta como todo Slytherin que se aprecie. Le gusta ver como los demás lo pasa mal siempre y cuando no se trate de sus seres queridos. Utiliza el sarcasmo con frecuencia y es sincera, sin importarle que sus comentarios puedas ser hirientes u ofensivos aunque a veces se muerde la lengua y se guarda opiniones para ella.

Gran defensora de la pureza de sangre. Siente repugnancia tanto por los muggles como por la sangre sucia y traidores a la sangre. Ve a los squibs y a los sangre sucia como algo antinatural.

Una mala experiencia ha hecho mella en ella hasta tal punto incluso de afectar parte de cordura y no solo dejando una cicatriz en su vientre. Su carácter depresivo pasa desapercibido al lado de su sed de sangre y su macabro sentido del humor.
. Sus ansias de venganza por aquel que le hizo daño no finalizaron cuando acabo con su vida y eso la convierte en alguien peligrosa. Da la sensación de que, una vez la conoces aunque sea de vista, sabes todo sobre ella; como actuara en determinadas ocasiones o que dirá en las conversaciones, pero es todo fachada. Es tan cambiante como el mar, con un temperamento Inestable-Introvertido. Por ejemplo: Es capaz de experimentar cólera, la cual dura un día o dos y luego se vuelve resentimiento.
A pesar de haber desarrollado cierto temor al compromiso, no está cerrada a él, no del todo. Le gusta que la miren, le gusta que la deseen y sentirse deseada, también jugar y sentir placer aunque solo hay una persona a la que está dispuesta a entregarse en cuerpo y alma.