Dark Knowledge [Draco]

La Biblioteca estaba silenciosa como de costumbre, pero Madame Pince estaba lejos de donde Blaise se encontraba. El joven rubio estaba sentado a una de las mesas cerca de la verja que dividía la Sección Prohibida del sector común de la misma. El muchacho Slytherin tenía la cabeza inclinada copiando algunas cosas de un libro que había sacado de la Sección. No era para ninguna asignatura en particular, simplemente estaba haciendo un trabajo de investigación por cuenta propia... Ese libro de Artes Oscuras describía la receta de un potente veneno, uno que era incluso inmune al bezoar. Continuó transcribiendo la receta para luego leerla no verbalmente. Era una de las pociones más difíciles que había visto, tanto por la dificultad para encontrar sus ingredientes como por su preparación.
"Una onza de polvo de colmillo de basilisco, medio litro de veneno de acromántula, tres cucharaditas de ceniza de ashwinder, un puñado de pelos de mantícora..." Y así seguía. El veneno era tan potente, que no solo actuaba como tal, sino también como peligroso ácido que hasta podía deshacer y corroer el titanio en cuestión de segundos.
Sonrió con malicia, el veneno era demasiado potente como para usarlo contra los asquerosos impuros, no es que Blaise tuviera demasiados escrúpulos en lo referente a ello, pero no quería problemas innecesarios. Pero el tóxico serviría para un futuro... Es decir, siempre era bueno estar bien preparado para lo imprevisto ¿verdad? Alguien que tuviera que quitar de en medio rápido, alguien que intentara dañarlo.

Blaise estaba tan concentrado transcribiendo la lista de los ingredientes y la preparación del veneno que no oyó la voz detrás suyo, y recién se dio cuenta de que tenía compañía cuando escuchó un ruido a su lado como si algo pesado cayese sobre la mesa. Miró de reojo y vio una pila de libros, luego observó ya del todo a su lado y allí estaba Draco Malfoy, que parecía mirar con curiosidad lo que él estaba leyendo y transcribiendo. Zabini se encogió de hombros y le dijo con simpleza, como si le dijese que iba a comprar caramelos a Honeydukes:
- Veneno. Mortus para ser más exactos, el veneno más potente del mundo mágico. Puedes echarle un vistazo a la receta, si quieres...
Dicho esto le pasó el pergamino con la extensa lista de ingredientes y los modos de preparación. Él, a diferencia de su amigo Theodore Nott, no era un experto pocionista. Su especialidad eran los Duelos y las Artes Oscuras en forma de hechizos y maldiciones (nadie discutía el talento de Blaise para éstas áreas de la magia) no los venenos, sin embargo, nunca estaba de más aprender cosas nuevas y esforzarse por sobresalir en algo que no es, precisamente, la especialidad de uno.
Se estiró en la silla, pegando la espalda a su respaldo mientras observaba a Draco y a la pila de volúmenes que había traído consigo, sonrió de costado y arqueando una ceja dijo:
- ¿Tarea de último minuto? ¿Quieres que te ayude con algo en particular? - No era común que Blaise se demostrase muy amable o colaborador con nadie, sin embargo (y a pesar de que a veces podía llegar a odiar a Draco por imaginarse acerca de él y Pansy fábulas que no eran muy placenteras para su propio orgullo) él era uno de sus amigos más cercanos, si no el más cercano y ahora mismo no sentía ninguna animadversión por él en ningún aspecto.
- Que raro que no están Crabbe y Goyle contigo... Aunque pensándolo bien, estamos en una Biblioteca, estos lugares ejercen una acción repelente contra ellos. - dijo con cierta sorna. A pesar de que fingía amistad para con Crabbe y Goyle, en realidad no soportaba su ignorancia y lo brutos y poco elegantes que podían llegar a ser, aunque si Draco los usaba como carne de cañón era un uso inteligente de ellos.